BARRANCO DE OTONEL

Río Jucar

Muela de Cortes

Dos aguas

(València)

27 de abril 2008

Siete y media de la mañana de un domingo cualquiera, vamos a intentar reseñaros fotográficamente el barranco de Otonel. Así que salgamos de dos Aguas por la CV-580 en dirección Millares...
... y en el punto kilométrico 50, cojamos un desvío a mano derecha que lleva hasta la población de Otonel y a la presa del Naranjero.
Sigamos sin tomar ningún otro desvío hasta cruzar tres túneles...y una vez salgamos del tercero, continuemos hasta encontrar un desvío a mano izquierda a la altura de un cartel que pone “Los Chorradores” (es la carretera que va a Otonel), tomemos el desvío que va hacia arriba.
Una vez terminada la subida del puerto y cuando la carretera comienza a descender, cojamos una pista de tierra a mano derecha que baja hacia una represa...
... donde encontraremos unos escampados (poco antes de llegar a la represa). De aquí...
... hasta el cauce del barranco...
... y el primer rápel, apenas hay 50 metros.
Se trata de un rápel de 25 metros...
... con un buen equipamiento para aproximarnos...
... a la anilla por donde pasaremos la cuerda para realizar...
... un rápel sin complicaciones en seco...
 ... que recepciona en una marmita vacía llena de gravas y arenas. Pero, ojo, después de fuertes lluvias es posible que este primer tramo lleve agua y nos encontremos con un rápel de menos altura y una marmita llena (valorar el caudal en este caso).
A continuación, llegaremos a un rápel de 12 metros...
... que nos encarama a unas chorreras que caen desde la derecha hidrográfica.
 El agua se precipita desde unos 40 metros de altura, difuminándose entre los musgos y cayendo pulverizada.
Tras hacer este rápel...
... y tener el primer contacto con el liquido elemento...
... atravesaremos un paso natural conformado por bloques soldados que suele encontrarse parcialmente sifonado...
... donde ponemos a prueba la estanqueidad de mi nueva Olympus 790SW...
... que de momento aguanta.
A continuación, viene un tramo de transición de unos 600 metros...
... que nos recuerda a las películas de Vietnam.
Lo salvaremos buscando las parcas sendas que recorren la derecha hidrográfica, entre juncos y maleza.
Tras unos 15 minutos de andar...
... nos encontraremos...
... con unos toboganes...
... que invitan a refrescarse...
... y buscaremos el equipamiento...
... para rapelar...
... una rampa resbaladiza de unos 15 metros...
...en cuyo final...
... se encuentra la cabecera de un rápel vertical...
... de unos 20 metros...
... donde el barranco...
 ... comienza a ponerse interesante...
... divertido...
 ... refrescante...
... y guapo.
Después de la siempre delicada maniobra...
... de recoger la cuerda, y siguiendo la badina de recepción del rápel...
... nos aproximamos con cuidado a la zona más encañonada de todo el descenso...
... la cabecera del rápel de 60 metros...
... donde gracias a una moderna instalación... 
... podemos tirar las cuerdas...
... y montar el rápel...
... en completa seguridad.
Un rápel para el cual tenemos que unir mediante un nudo Pescador Doble dos cuerdas de 60 metros...
... que, como veis, ni tiene el mismo diámetro y ni son especiales para barrancos...
... pero es lo que hay, así que para abajo... 
... en simple...
... que en doble hay demasiado rozamiento...
.. pero sin alejarnos de la otra cuerda, como estoy haciendo yo, (más concentrado en hacer fotos que en el rápel), porque sin saberlo, al tirarla, ha quedado enredada y engancha...
... por eso me gusta rapelar con el Shunt de Petzl...
... este autobloqueador automático, además de permitirte parar en mitad del rápel...
... para hacer fotografías y desenganchar la cuerda...
... te detendría al instante si tuvieras cualquier percance...
... evitando que te fueras para abajo a toda hostia...
... aunque con la cuerda que llevo y el reverso...
... no iría muy rápido por el excesivo rozamiento.
Para hacer barrancos y con cuerdas gruesas mejor el Ocho...
... o la Piraña que lleva Antonio...
... a él le toca bajar en doble...
... y desenredar la cuerda que se había quedado enganchada en mitad de la cascada...
... si no, habríamos tenido que remontar el rápel para poderlas recuperar...
... ya que el nudo de unión se encontraba en la parte de la cuerda que se había quedado enganchada...
... supongo que entendéis lo que os digo.
Por suerte, Antonio lo vio claro desde arriba y bajó por las dos cuerdas...
... aunque yo ya me había quedado en el fraccionamiento del rápel, para avisarle de lo sucedido por si hubiera bajado en simple.
Conclusión, cuando bajes por un rápel en simple nunca te alejes de la otra cuerda, así siempre podrás desengancharla, y no te pasará como a mí, que cuando me había dado cuenta estaba demasiado abajo y ya no tenía acceso a la cuerda enganchada.
Bueno, terminado el rápel, toca recuperar las cuerdas, que cuesta un huevo con el rozamiento que hay.
Au, ya está...
... ¿mola, eh?.
Ahora, ¿tobogán o salto?...
... preferimos salto...
... y después tobogán...
... buen momento para volver a probar la cámara...
... que ya podemos decir...
... que es completamente sumergible...
... guay, este verano vamos a disfrutar con ella en Guara.
Mientras nos saludan desde el puente de Cavera, nos tomamos un pequeño descanso para comer algo, pero sin entretenernos mucho, que ya es la una.
Y enseguida seguimos con el rápel de una rampa resbaladiza...
... de unos 20 metros...
... que nos deja...
... junto a la instalación...
 ... del último rápel.
35 metros...
... verticales.
Una pasada, como todo el barranco...
... y pensar que lo tenemos a hora y media de casa y aún no lo habíamos hecho.
Pero todo lo bueno se acaba...
... y lo malo también, nada es para siempre...
... ni siquiera los recuerdos...
... que también se irán con nosotros...
Así que...
 ... subamos por la pedrera que hay a mano izquierda del último rápel, volvamos al puente de Cavera, remontemos la carretera por el puerto y bajemos a por el coche...
... que en Dos Aigües anem a fer-mos unes cervesses en "llonganisses, botifarres, chorisso, llomello, y un ou caigut".